miércoles, 14 de abril de 2021

Justicia Restaurativa como forma de vida


 INTRODUCCIÓN "Derribar y destruir es muy fácil. Los héroes son aquellos que construyen y que trabajan por la paz". Nelson Mandela

Antes de escribir este artículo un poco peculiar, que jamás pensé que iba a escribir  en este blog, quiero mostrar mis condolencias por todos los fallecidos por esta pandemia que estamos sufriendo, porque muchos de ellos y ellas, fueron los niños de la guerra (en Europa la guerra mundial y en España la guerra civil) y de la postguerra, ahora están muriendo los niños que en aquel entonces tuvieron que vivir con las bombas, sufrir lo que es no tener que comer...es decir ellos y ellas si vivieron lo que es pasar penurias, y mientras nosotros estamos estresados por vivir con todas las comodidades ( no todos por supuesto pero si muchos) encerrados en nuestra casa. No puedo más que expresar mi tristeza por nuestros mayores y en general, los fallecidos por el covid 19.

Dicho esto espero que lo que estamos viviendo nos sirva para resurgir de las cenizas como el ave fénix

Lo vivido estos días está sacando lo mejor y lo peor de cada uno de nosotros pero me quedo con lo mejor con la solidaridad, con el humor para paliar los malos momentos, con las ideas originales  para hacer la cuarentena más llevadera, con el gran trabajo de muchos profesionales y sobre todo con la humanidad que esta rebrotando de todos nosotros.

JUSTICIA RESTAURATIVA COMO FORMA DE VIDA

Más que nunca hoy creo que la justicia restaurativa es un movimiento social o una forma de vida. Según autores como Howard Zehr, lo más importante para la justicia restaurativa es el respeto, la responsabilidad y la conexión (relationship) ¿Y qué estamos descubriendo estos días?

Precisamente nos hemos dado cuenta qué importante es la conexión, los abrazos, las sonrisas que se cruzan cuando compartimos con la gente que queremos, incluso con desconocidos. Ese momento de complicidad...qué esencial es relacionarnos. Los seres humanos vivimos desde que nacemos en comunidad, y el aislamiento aunque sea con algunos de nuestros seres queridos, nos está recordando la importancia de compartir, de relacionarnos en definitiva de sentir la conexión con otras personas.

Además  estamos aprendiendo a responsabilizarnos, a sentir que no es "papa estado" el que cuida de nosotros, ahora todos tenemos que entender que es nuestra responsabilidad quedarnos en casa, y ayudar así a que el virus deje de circular, pero también debemos hacernos responsables del futuro, qué queremos dejar a nuestras generaciones futuras. Debemos por fin, tener en cuenta que solo tenemos una vida y un planeta: la tierra. 

Y por último, estamos aprendiendo a respetar a cada ciudadano por sus cualidades a los médicos que están haciendo un trabajo impresionante, policías, bomberos, camioneros y transportistas, cajeros de supermercados , padres y madres con hijos, personas mayores, personas con capacidades diferentes...y tantas y tantas personas que cada día se levantan y aunque no sea el día perfecto, intentan que lo parezca lo más posible. 

MÁS QUE CONCLUSIÓN MI DESEO

Por tanto, estoy convencida que el mundo cambiará pero para bien, porque después de la tempestad viene la calma y creo que esto que está sucediendo nos está ayudando a reconectar con nuestra humanidad, que muchas veces por lo cotidiano del día a día, la rutina, la rapidez con la que vivimos se nos estaba olvidando. 


1 comentario:

  1. Hola, Virginia. Te escribí hace unos días al correo que me dijiste; no sé si te llegó. ¡Muchas gracias!

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