INTRODUCCIÓN
Los que nos dedicamos a la Justicia Restaurativa, (nótese que he dicho justicia restaurativa no mediación, coaching, terapia, comunicación no violenta etc) podemos caer en el error de prejuzgar sin querer, un caso claro, es si una víctima tiene deseos de venganza o por ejemplo, rehúsa participar en un proceso de justicia restaurativa. Sin embargo, no hay víctimas "buenas" y "malas". Todas merecen nuestro respeto y consideración y en todo caso, es indudable que debemos dejarlas tiempo, porque es lógico que en un primer momento, la víctima esté confusa y no vea los beneficios de estos procesos restaurativos, pero más adelante su visión puede cambiar, de ahí, que establecer protocolos rígidos y tasados, para la Justicia Restaurativa,, lo único que hacer es limitar el trabajo de los facilitadores pero sobre todo lo que hace es, perjudicar a los que más necesitan de esta justicia: las víctimas. Dicho esto, lo lógico y lo normal tras sufrir un delito es tener estos sentimientos negativos. Todas merecen nuestro reconocimiento y nuestra atención. Pero poco a poco algunas personas tienen otras necesidades y reivindicaciones que la justicia tradicional no va a poder atender.
ENCONTRAR UNA NARRATIVA DIFERENTE A LO VIVIDO
Las personas que sufren un daño necesitar recuperar el control de su vida y en ocasiones esto puede favorecerse a través de las transformación de estos sentimientos negativos en otros más positivas que la puedan ayudar resignificar lo sufrido y poder incorporarlo a su historia vital como otro aspecto y para ello se le debe ayudar a encontrar una narrativa diferente que es lo que facilita los procesos de justicia restaurativa.
Por eso nuestra labor es ayudar de la manera más adecuada a cada victima, en ocasiones esto podrá conllevar un encuentro restaurativo pero en otras lo más restaurativo será no hacerlo y para ello hay otras opciones como los programas individuales para víctimas (os invito a leer nuestro programa individual para víctimas ave fénix https://justiciarestaurativa.es/actividades/programa-de-atencion-a-victimas-de-delitos-ave-fenix/ y si alguno de vosotros conoce alguna persona que quiera participar sois bienvenidos/as empezaremos un grupo online con víctimas de Bolivia pero planeamos más online para llegar a más personas) . Las víctimas no son seres incapaces ni necesitados de tutela, por eso no debemos creer que siempre y en todo caso, tenemos la obligación de decidir por ellas, lo que creemos que las conviene. Cada víctima necesita encontrar su propio camino restaurador o sanador.
LOS BENEFICIOS DE LA JUSTICIA RESTAURATIVA
Lo bueno que tiene la Justicia Restaurativa es que favorece o ayuda en este camino de transformación de sentimientos negativos, en otros más positivos o al menos menos dolorosos y más productivos. El otro día escuché a una madre cuya hija fue asesinada, decir que vivió siete años en la oscuridad más profunda y que cuando vio el camino hacia pensamientos más reinsertadores, es cuando recuperó el control de su vida, es cuando se dio cuenta que durante esos siete años su vida había estado controlada por el delito e indirectamente por el delincuente. Dicho esto, no todas las víctimas necesitaran encuentros restaurativos, ni para todas será igual de fácil o difícil, pero lo que si es cierto es que cada víctima debe encontrar su camino hacia la restauración emocional, para unas será honrar la memoria de su ser querido fallecido, para otras luchar porque nadie vuelva a sufrir lo mismo, para otros será el perdón...etc. Como cada persona es diferente, cada víctima también, y nuestra obligación es ofrecerlas todos los recursos restaurativos y de ayuda existentes. Solo así podrán despojarse de su "rol" de víctima para pasar a llevar otro más digno: "superviviente".
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