La preparación de las personas antes de un encuentro conjunto

 

INTRODUCCIÓN

Muchas ocasiones se "vende" las bondades de la justicia restaurativa y en concreto, los encuentros, nos han llenado la cabeza de lo bonito y sanador qué es pero frecuentemente no se nos cuenta qué se hace antes de estos encuentros. Y el problema es que cuando se va a facilitar un proceso restaurativo, no solo hay que tener la formación adecuada sino hay que tener claro cuál es el papel que juega en todo el proceso. En todos los delitos es importante tener en cuenta esto pero si vas a facilitar delitos graves es todavía más importante conocer los límites y la función del facilitador y realmente por lo que veo continuamente en prensa no es fácil. En más de una ocasión he comentado que el facilitador no juzga, ni sermonea por tanto no pregunta a la persona ofensora ¿ a cuántos has matado  y cómo? ¿celebraste los atentados o pudiste dormir por la noche? Estas preguntas no son imaginadas sino que se han dicho por teóricos expertos y que según ellos y ellas son las  que han hecho en una preparación antes de un encuentro conjunto. Pensé que era algo anecdótico y que quizá no se había entendido el proceso de preparación con la persona ofensora pero claramente y después de leer ciertas noticias parece que este no saber qué hacer en una preparación también sucede cuando se trabaja con las víctimas.

LA PREPARACIÓN ANTES DE UN POSIBLE ENCUENTRO CONJUNTO

Así se puede leer en una nota de prensa cómo una víctima relata las reuniones preparatorias: "fueron muy duras, me preguntaba ¿qué opinas de la pena de muerte, de las segundas oportunidades, de la reinserción, de la justicia, si tuvieras una pistola qué harias...? En un momento me dijo que estaba preparado y que me iba a reunir..."

Quizá alguien que no sepa lo que es la justicia restaurativa puede pensar que son preguntas correctas pero esto es un claro ejemplo de lo que no hace nunca un facilitador. Podría incluirse en un manual de los posibles errores que no debe cometer un facilitador. El facilitador no hace una reunión para dar una charla a la víctima, no trata de decirla que debe ser buena, perdonar, que no debe tener deseos de venganza.....es más con la pregunta si tuvieras una pistola, todavía estoy pensando que quería conseguir la facilitadora. Puedo entender que cuando se trabaja con personas ofensoras corramos el riesgo de querer sermonearlos y ofrecerles charlas moralizantes, esto no es restaurativo pero podemos correr el riesgo de hacerlo porque somos humanos. Pero en serio,  se ha hecho esta preparación con víctimas de delitos graves, parece que la facilitadora quiere mostrar una superioridad moral haciéndola entender que debe creer en la reinserción, que no debe tener pensamientos negativos.....Esto no es justicia restaurativa, el facilitador lo que hace es preguntar por la historia, sus sentimiento y necesidades, esto es lo que es importante para el facilitador en una reunión preparatoria y es lo que le servirá para saber si es viable una reunión conjunta. Cualquier otra cosa que se pregunte como los ejemplos de la noticia es cualquier cosa menos justicia restaurativa. Quiero creer que se han obsesionado tanto con decir que impartir un taller (que no es otra cosa que dar un curso) es hacer justicia restaurativa que se piensan que en la preparación lo que se debe hacer es seguir con esta charla y sermón en el que  la persona ofensora debe cambiar y la víctima debe ser buena y perdonar. Y por último, igual que si una persona ofensora no se responsabiliza y asume el daño no puede participar en un encuentro conjunto, si una víctima no cree que pueda ser positivo para ella el encuentro, no lo encuentra necesario o tiene reticencias no se debería permitir realizar la reunión conjunta. No podemos forzar este encuentro si la víctima no está preparada porque también debemos velar por la persona ofensora. 

CONCLUSIONES

El facilitador tiene unas funciones claras que nada tienen que ver como las del juez, las del abogado, las del mediador, psicólogo...etc. En lugar de alabar malas prácticas vamos a ser éticos y a hacer examen de conciencia porque todos podemos mejorar en nuestra forma de facilitar procesos restaurativos, la clave la formación continua. También sería importante que se deje de "manosear" la justicia restaurativa por políticos, todólogos y demás personas que nunca se han interesado por ella pero ahora como está de moda se ha subido al carro. La justicia restaurativa es la justicia de la comunidad no de las administraciones.