sábado, 13 de diciembre de 2025

Reflexiones para una mirada restaurativa

 


(imagen propiedad de Virginia Domingo)

La justicia restaurativa nos recuerda que detrás de cada daño,  hay una persona, no un caso.

Antes de reparar, debemos escuchar; antes de proponer, debemos comprender.

Un espacio restaurativo no se define por el lugar, sino por la calidad de la conexión y seguridad para poder narrar las historias

Restaurar no es volver atrás, sino avanzar con un nuevo sentido.

Cuando una historia se cuenta con valentía y es escuchada con respeto, algo se transforma en todos.

La comunidad sana cuando cada voz encuentra un lugar para ser reconocida.

Acompañar implica sostener sin dirigir, escuchar sin juzgar y abrir caminos sin imponerlos.

Los círculos como una de las metodologías de la justicia restaurativa  son recordatorios de que la reparación es un proceso colectivo y profundamente humano.

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